La función del edificio es la de acoger a las mujeres víctimas de violencia de género y de sus hijos, dándoles un espacio de residencia, de atención y de desarrollo personal.

El edificio lo forman una serie de piezas blancas, correspondientes a los usos residencial, servicios y cultural, con geometrías distintas, giradas, más abiertas o cerradas en función de su privacidad, de su uso, de la orientación….

Piezas blancas que dan protagonismo a la luz, a la arquitectura doméstica, a los espacios exteriores que surgen entre ellas, a modo de patios, y a los recorridos interiores fluidos y luminosos.

Como elementos singulares, piezas que sobresalen de la fachada, como envolventes metálicas, revestimientos translúcidos de policarbonato, color en algunos elementos y diseño de espacio cultural dedicado a la mujer.

El proyecto de edificación, la dirección de obra, el proyecto de amueblamiento y su dirección, hemos trabajado muchos años en este edificio y hemos tenido colaboradores profesionales en diferentes áreas, entre ellos artistas extremeños que han dejado su huella en el edificio, en fotografías y obras pictóricas.